miércoles, 13 de abril de 2011

Salud Mental

INTRODUCCIÓN
La salud mental es un tema que cada vez toma mayor importancia a nivel mundial, a lo largo de éste tema haremos una breve mención acerca de la historia sobre la psiquiatría, así como la importancia de la salud mental a nivel mundial, los recursos destinados al tratamiento de la misma, así como el impacto social que presenta en los últimos años. Lejos de disminuir el nivel de trastornos mentales, con el paso del tiempo, éstos se han ido incrementando, de aquí la importancia de conocer las estadísticas actuales para tener un panorama amplio acerca de la problemática que nos afecta y que amenaza con seguir aumentando.

PANORAMA GENERAL Y BREVE HISTORIA SOBRE LA EPIDEMIOLOGIA PSIQUIÁTRICA
Para poder comprender más el tema, tendremos que definir el concepto de  la epidemiología psiquiátrica, la cual es  una rama de las ciencias de la salud que se dedica al estudio de la frecuencia de los trastornos mentales en las comunidades y a la descripción de cómo los diversos contextos sociales demográficos y culturales pueden afectar o proteger la salud mental y el comportamiento de los individuos a lo largo del tiempo, esto nos permite conocer cuáles son las enfermedades más comunes y así poder realizar un análisis sobre las características de dicha enfermedad identificando algunos factores en común que podrían ser considerados como un factor de riesgo, evitando que nuestros pacientes desarrollen el problema mental o alguna consecuencia en pacientes ya enfermos.
La epidemiología tuvo sus comienzos en el siglo XIX, en 1837, con la introducción por parte de William Farr de las estadísticas de nacimientos y
defunciones en la Oficina Británica de Registros Generales.  La historia de la epidemiología psiquiátrica fue dividida por muchos autores en dos fases diferenciadas. La primera fase abarca de 1930 a 1960, cuando se realizaban estudios epidemiológicos con entrevistas clínicas no estandarizadas y cuestionarios, la segunda fase de los estudios epidemiológicos fue un poco mas avanzada pues se basó en la elaboración de instrumentos estandarizados, entrevistas psiquiátricas y cuestionarios de tamizaje validados. Los primeros criterios operativos para diagnósticos psiquiátricos fueron elaborados por Feigner en la Universidad de Washington, St. Louis, seguidos de los criterios de diagnósticos de investigación, con esto podemos observar que la primera fase fue el punto de partida y la base fundamental para el surgimiento de la epidemiologia y la segunda fue un mejoramiento en los procedimientos de investigación mas certeros y cercanos a la realidad.
Fue así como surgieron varios estudios transversales que han abordado la prevalencia y los factores de riesgo de los trastornos mentales más frecuentes, y en muchos de ellos se han empleado métodos complejos de selección y análisis de la muestra, los cuales han sido muy útiles para la medicina pues gracias a estos el personal de salud está capacitado para la prevención y el tratamiento de las enfermedades mentales que en la actualidad suelen presentarse con mayor incidencia.
Consideramos que la epidemiologia toma también función diagnostica para identificar  las necesidades de la población y las deficiencias en atención medica que pueden implementarse o en algunos casos mejorarse siempre con el propósito de erradicar alguna enfermedad con acciones de prevención y promoción a la salud.

LA ENCUESTA MUNDIAL DE LA SALUD MENTAL DE LA ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD.
Al no existir datos sobre la salud mental y la prevalencia de enfermedades mentales  en América Latina,  la OMS creo y auspicio a  World Mental Health Survey Consortium (WMH) cuyos objetivos son  llevar a cabo estudios comparativos transnacionales y coordinar la implementación y el análisis de encuestas epidemiológicas en poblaciones generales sobre trastornos mentales, trastornos por abuso de sustancias y trastornos conductuales en diversos países. Las encuestas WMH prometen contribuir en forma importante al menos de tres maneras. En primer lugar, proporcionan datos de base que pueden utilizar los planificadores de políticas de salud con respecto a la prevalencia y el costo de los trastornos mentales en América Latina. En segundo lugar, las encuestas proporcionan datos sobre el estado mental de la población y los costos económicos relacionados con los trastornos mentales, es decir los costos directos del tratamiento y los costos indirectos por no recibir tratamiento, el desempleo, la reducción de la productividad en el trabajo y el mayor número de accidentes. En tercer lugar, las encuestas proporcionan datos sobre la identificación de barreras modificables que impiden buscar y utilizar los tratamientos.
Al realizar las encuestas epidemiológicas  en la población jóvenes -adulta para fin  saber que trastornos eran los más comunes en las siguientes ciudades, los resultados  fueron  los siguientes: Argentina presentaba  la esquizofrenia como el primer trastorno mental,  Perú  los trastornos depresivos, Chile los trastornos de ansiedad y en México eran los trastornos psiquiátricos
Es así como la DIS y la CIDI llegaron a  la conclusión de que los trastornos mentales se encuentran entre las clases más prevalentes de enfermedades crónicas en la población general, por lo común  tienen edades de inicio mucho más tempranas, se encuentran entre las enfermedades que causan mayor discapacidad.
Hasta hace muy poco la información con respecto a las tasas de prevalencia de los trastornos mentales en América Latina o sobre las necesidades en cuanto a la salud mental de la población era limitada, así como su cobertura de atención este  es un factor que contribuye al destacado lugar que ocupan estos problemas.
Sin tal información ha sido difícil planificar políticas nacionales de salud de manera más racional y apropiada, en especial en sociedades con grandes poblaciones, mal atendidas y que se encuentran en transición epidemiológica, poblacional y económica.
Al analizar los factores que influyen en la presencia de los trastornos mentales estas pueden ser  por las grandes transiciones demográficas como el envejecimiento de la población y a su vez las sociales como la migración, violencia e inseguridad, incrementan el riesgo de los trastornos mentales y, de no mejorarse las condiciones y la atención de la salud mental, alcanzará lugares aún más prominentes debido a la disminución de otras enfermedades con mayor cobertura preventiva y de tratamiento
En cuanto a nuestro país que creemos que es la parte más importante para analizar  ya que nosotros como personal de la salud, tenemos la responsabilidad de dominar un poco sobre este tema para saber los factores , las causas, las edades y los tratamientos de estos trastornos, para poder brindar una atención de calidad y eficiencia.
Las encuestas mundiales nos dicen que nuestro país  la mayor parte de la población con trastornos mentales no recibe tratamiento y la porción de personas que reciben el tratamiento, tienen padecimientos leves o síntomas, sin presentar el diagnóstico; y pueden llegar a  tardar entre 4 y 20 años en recibir dicho tratamiento  según el tipo de trastorno.
Estos resultados señalan la necesidad de reorientar los servicios de tratamiento, para incluir a los casos más severos y asegurar que el tratamiento sea más oportuno y apropiado. Asimismo, es necesario establecer campañas para reducir el estigma y mejorar la conciencia popular acerca de la presencia de trastornos mentales y de la efectividad de los tratamientos.
La incorporación de un mayor número de médicos generales en el estudio de la psiquiatría permitirá tener más recursos para atender a una demanda creciente de atención. Ya que México tiene a cinco psiquiatras por cada 100.000 habitantes, por lo que es necesario incrementar el número de enfermeras y trabajadoras sociales psiquiátricas, incorporar a psicólogos capacitados en el manejo de pacientes en los servicios de atención, e incorporar en la currícula y en los cursos de actualización para personal de salud, de acuerdo con su profesión, el manejo de las nuevas terapias farmacológicas, psicosociales y de apoyo a las familias, haciendo hincapié en la perspectiva sobre salud pública y atención comunitaria.
Finalmente creemos que hasta hoy en día los trastornos mentales, no reciben la atención que merecen y entre algunos de los factores asociados a este descuido se destacan la forma en que tradicionalmente se han establecido las prioridades de atención de  la salud, el desconocimiento de las enfermedades mentales, los nuevos avances en su tratamiento y el estigma  que rodea a estos padecimientos.
Así como la adopción de nuevos paradigmas que ha dado más visibilidad a las enfermedades mentales y ha sentado las bases para modificar el rezago de que son objeto.
 Para permitir una adecuada planeación en políticas y servicios de salud se requiere evidencia sobre qué tan extendida está la enfermedad según el tipo de padecimiento, cómo afecta diferencialmente a los distintos grupos de población, la proporción de la demanda atendida y las necesidades no cubiertas. 

ESTUDIOS EPIDEMIOLÓGICOS COMUNITARIOS
La mayoría de los estudios epidemiológicos publicados en el mundo sobre las poblaciones Caribeñas, América Latina y México se han concentrado en la esquizofrenia y trastornos mentales  debido al sorprendente aumento de los índices de riesgo en la población  desde una perspectiva exclusivamente genética hacia causales ambientales multifactoriales, así como la función que la epidemiología del Caribe desempeña en este cambio.  Pues las tasas elevadas de discapacidad a causa de los trastornos neuropsiquiátricos demuestran que se trata de afecciones que requieren tratamiento. Son trastornos que aparecen con una prevalencia significativamente alta y que deberían estar muy presentes en los programas de salud pública.
La aparición de la enfermedad mental en etapas tempranas de la vida da lugar a una discapacidad y una carga prolongada ya que el curso de la enfermedad cuando no se recibe tratamiento suele ser crónico y debilitante pues existen datos probatorios sólidos de la importancia del tratamiento para reducir la discapacidad de la persona y su familia, aliviar los síntomas y modificar el curso de la enfermedad además que el  grado de carga de morbilidad. El costo económico de la enfermedad y la discapacidad asociada, tanto para el individuo como para la familia, alcanzan tal magnitud que el fracaso de la intervención tiene un precio inadmisible.
Nosotras consideramos que el  no prestar la debida atención temprana  de tratamiento puede tener graves implicaciones en materia de salud pública. El incremento de la pobreza, el descenso de la clase social y la disminución del nivel educativo alcanzado son posibles consecuencias de la falta de tratamiento de las enfermedades mentales.
Desde el punto de vista epidemiológico psiquiátrico de México, a lo largo de los años se ha mostrado el paso de los estudios exploratorios y descriptivos hasta el análisis y la medición de riesgo y además que en comparación con los resultados de otros estudios, entre ellos los realizados en América Latina y el Caribe ha mostrado semejanzas que sugieren que podrían atribuirse a factores biológicos u otras características humanas relativamente independientes de las influencias socioculturales. Consideramos que estas juegan un papel que requiere estudiarse con más detenimiento desde el enfoque de la psicopatología del desarrollo.
Una pieza clave o importante que nosotras consideramos es el estudio enfocado en las comunidades rurales pues la mayoría de los estudios estan basados en personas de poblaciones urbanas, entonces no deberíamos olvidar estas poblaciones rurales considerando que es una población vulnerable también a este tipo de enfermedades .
Logramos detectar que en todos los estudios hay factores de riesgo trascendentales en las enfermedades psiquiátricas que son las de Esclavitud (Puerto Rico), ya que eran considerados como animales para venderlos y Migración pues el estrés o falta de convivencia familiar que influyen y predisponen  a desencadenar estos trastornos.

Analizando la lectura de los artículos, encontramos que hay una prevalecía parecida en todos los países de América Latina en las  enfermedades mentales basándonos en tablas estadísticas Méxicanas y Puertoriqueñas arrojando las siguientes enfermedades de mayor incidencia:
Trastorno afectivo
Episodio maníaco
Episodio depresivo mayor
Distimia
Cualquier trastorno
Fobia
Social Simple Agorafobia
Pánico
Obsesivo-compulsivo
Trastorno de somatización
Esquizofrenia

Se observó que los puertorriqueños presentaban más trastornos de somatización,( es un diagnóstico psiquiátrico aplicado a pacientes quienes se quejan crónica y persistentemente de varios síntomas físicos que no tienen un origen físico identificable, una explicación etiológica común es que conflictos psicológicos internos son expresados como signos físicos) pero menos trastornos afectivos y relacionados con el alcohol que los mexicano- estadounidenses o los blancos no-hispanos nacidos en los Estados Unidos.
Determinamos que existen una serie de síntomas habituales que describían el “ataque de nervios” se mencionaban gritar incontrolablemente, ponerse nervioso, temblar, romper cosas, ponerse histérico, desmayarse o perder el conocimiento, la agresividad y la desesperación. Se observó que las personas que notificaron la ocurrencia de un “ataque” tenían mayores probabilidades de ser mujeres y de alcanzar los criterios de trastorno depresivo o de ansiedad.

CONCLUSIÓN
Hoy en día es bien sabido que las enfermedades mentales existen, pero sobre todo, que con un tratamiento adecuado, se pueden tratar, y así, de ésta forma evitar repercusiones graves en el organismo; sin embargo no existen los recursos necesarios para satisfacer la demanda de la sociedad.
A medida que pasa el tiempo, los transtornos se hacen más frecuentes, sín embargo no hay suficiente personal capacitado para atender casos con algún tipo de patología psiquiátrica. Es necesario capacitar a personal para que sea capaz de atender y dar orientación a personas que padecen alguna enfermedad mental, o bien, que está en riesgo de padecerla.

Bibliografía
·         Rodríguez Jorge J.  (2009)Coordinador del Proyecto de Salud Mental, Discapacidades y Rehabilitación, Organización Panamericana de la Salud.
Washington, DC, EUA.

domingo, 10 de abril de 2011

“Análisis de artículos científicos: utilización de servicios de atención a la salud mental en mujeres víctimas de violencia conyugal y trastorno bipolar”


Nuestro equipo analizo dos artículos de los cuales uno de ellos hablaba sobre la utilización de los servicios médicos por parte de las mujeres que sufren violencia conyugal,  es hablado desde un enfoque medico y psicológico, aquí se tomaron a 135 mujeres de las cuales se les realizo una pequeña entrevista;  en su mayoría eran casadas, de edad promedio entre 35 y 44años, de ellas el 75%  se dedicaban a las labores del hogar y tenían aproximadamente una escolaridad baja (primaria).

Se encontró que la prevalencia de trastornos mentales de las mujeres entrevistadas el 8.9% cubrió los criterios de trastorno depresivo y 21.7% los criterios de trastorno de ansiedad. Y del total de mujeres que reportaron al menos una forma de maltrato, 16.2% buscaron algún tipo de ayuda para atender sus problemas de salud mental. Así, se observa que 41.7% de las que cubrieron los criterios de trastorno depresivo recurrieron a especialistas en salud mental y 25% buscaron ayuda con médicos generales.

Del otro artículo habla sobre el trastorno bipolar, es tratado desde un enfoque medico, ya que menciona que este trastorno  se debe a una falla en el sistema neurológico sobre todo en la parte cognitiva en la  onda P3 que refleja la atención en el lóbulo parietal, menciona que los que padecen este tipo de trastorno tiene problemas en el aprendizaje y tienen un nivel de mayor frustración.

Por lo que nuestro equipo concluye que los factores que influyen en la salud mental son las circunstancias de la vida (en el primer artículo)  debido a que las mujeres sufren de ansiedad, por el rechazo de la pareja, lo que puede llegar a  provocar aislamiento social, culpabilidad e inseguridad, es así que la salud mental en ellas se ve afectada y las características hereditarias (en el segundo) ya que se deben a procesos fisiológicos del organismo, por lo que  puede llegar a  repercutir en su rendimiento escolar y social , ya que esta disminuida su habilidad para el aprendizaje , lo que genera frustración, llegando  a causar un problema  de mayor gravedad y repercutir en su estado emocional.

Es por eso que nosotros como personal de salud tenemos  la obligación de  conocer, identificar y auxiliar, a las personas que padezcan este tipo de problemas, para que tengan un tratamiento adecuado y que lleguen a tener una calidad de vida mejor.